San Valentín es el día del amor, eso está claro. Pero a veces las parejas van algo más allá de los bombones o la cena romántica perfecta… Nuestra redactora Marta ha encontrado seis historias perfectas para cuando llega el momento de «venir a casa a ver Netflix», como se dice ahora.
25-sai no joshikōsei
Hana Natori es una mujer de 25 años, normal y corriente, a la que un día su tía le pide que sustituya a su prima en sus clases de preparatoria, al ser las dos prácticamente iguales. Como ella es amable y quiere echar un cable a su prima, accede a hacerse pasar por ella, con la mala suerte de que es reconocida por su ex-compañero de clase Okito Kanie, que ahora es profesor en el mismo instituto al que va su prima.
Tras ser «pillada» por él, comienza una tórrida relación en la que Kanie se aprovecha de la situación, poniendo a Natori en diferentes situaciones comprometidas, pero, a la vez, la ayuda a sobrevivir en su nuevo papel de estudiante de preparatoria.
Una serie que lleva el mito erótico de la alumna y profesor a otro nivel, en la que disfrutaremos de escenas subidas de tono en cada uno de sus 12 capítulos.
Kuro-Gyaru ni Natta Kara Shinyū to Shite Mita
Shion Chihara y Rui Chihaya son dos amigos universitarios a los que ninguna mujer se puede resistir, lo que hace que a veces jueguen con ellas y las acaben hiriendo, sobre todo Shion. Precisamente, una de estas mujeres engañadas por Shion lo acaba convirtiendo en mujer mediante algún tipo de droga, para que experimente en sus propias carnes lo que se siente. Rui, al descubrirlo, siente el impulso de hacerla suya en varias ocasiones, con la consecuencia de que Shion vuelve a convertirse en hombre.
Entre los dos comenzarán a investigar la manera de detener el proceso por el que Shion se convierte en mujer, y entre investigación e investigación, Rui se acostará con su mejor amigo, tanto en su forma femenina como masculina.
Una serie que a lo largo de los 8 capítulos que la componen nos proporcionará altas dosis de sexo heterosexual y homosexual a partes iguales.
Kanojo ga nekomimi ni kigaetara
Se trata de un hentai que cuenta con una OVA publicada, en la que conocemos a Haruna y Shougo, una pareja que está tranquilamente jugando a un videojuego. Para darle más emoción al juego, Shōgo propone que el que pierda tendrá que hacer todo lo que le diga el ganador, a lo que Haruna acepta, con la mala suerte de que es ella la perdedora. Shougo no va a desperdiciar la oportunidad y aprovecha para vestir a su novia de neko (gatita) con un traje muy sexy.
Comienza un erótico juego en la que Haruna tendrá que satisfacer al completo las fantasías de Shōgo.
Maō Evelogia ni mi wo sasage yo
Toshiaki Gōzu tenía un videojuego favorito cuando era pequeño. En ese videojuego, un héroe reunía a un grupo de guerreros para enfrentarse contra el rey demonio Evelogia. A pesar de que en el juego había que derrotarlo, Gōzu sentía cierto cariño y admiración por ese rey demonio. Ya siendo adulto, es asesinado a tiros y su último pensamiento es para este personaje, Evelogia. Cuando vuelve a abrir los ojos, se encuentra en otro mundo, en el que un matrimonio le está pidiendo ayuda para que mate a su hijo: un jovencito y aún inexperto rey demonio Evelogia.
Nada más cruzarse el camino de Gōzu y Evelogia, comienza el trayecto de este último para convertirse en el rey demonio que debe ser, solo que está vez tendrá alguien al lado que le protegerá y el amará, y que le entregará su cuerpo y vida al completo.
Sōryo to majiwaru shikiyoku no yoru ni…
En esta historia, nuestra protagonista Mio Fukatani se reencuentra con Kujo, su amor platónico del instituto, en una fiesta de antiguos estudiantes. Allí descubre que actualmente Kujo es sacerdote en el templo de su familia, lo que la desanima bastante puesto que piensa que los sacerdotes llevan una vida pura alejada de las tentaciones. Para ahogar sus penas, Mio se pasa de beber, por lo que Kujo se ofrece a acompañarla hasta su casa.
Sin darse cuenta, esa noche termina con Kujo entre sus sábanas, que le deja claro que, antes de sacerdote, es un hombre. Desde ese día, Mio tendrá que aprender sobre la vida en el templo y enfrentarse a la familia de Kujo.
Omiai aite wa oshiego, tsuyokina, mondaiji
Nano Saikawa es profesora en un instituto y no ha pensado mucho en el matrimonio, por lo que sus padres han concertado una cita con el hijo de un viejo amigo: Sōichirō Takamiya. Nano accede a conocerlo y pasan el día juntos. La cosa se va calentando y acaban los dos en la cama, donde descubre que el supuesto Sōichirō Takamiya es en realidad Sōji Kuga, uno de sus estudiantes.
La explicación de Kuga es sencilla: cuando supo que Nano iba a quedar con su hermano, decidió tomar su lugar y ser él la cita de Nano, a la que le pide que sea su prometida. A pesar de las reticencias de Nano debido a que Kuga es alumno, tanto la familia de él como la de ella están encantados, y Kuga no va a dejarla escapar tan fácilmente.