Tomo a tomo: Y aun así, eres muy dulce

La joven Maaya Kisaragi no tiene suerte en el amor. Tras varios meses reuniendo valor se declara al chico que le gusta, pero este le da calabazas. Chigira, responsable con ella de la biblioteca del instituto, la ve triste y le propone jugar a que son una pareja real, pero con la condición de que no deben enamorarse. Maaya acepta el juego y, debido a la amabilidad y ternura de Chigira, empezará a temer que lo que siente por él vaya más allá del juego…

No puede faltar una comedia romántica estudiantil que estrenar de vez en cuando en nuestras lecturas. Y aún así, eres muy dulce es una historia romántica con un planteamiento divertido y una pareja protagonista que, si bien puede empezar descompensada, sirve como motor de una historia que por ahora deja momentos hermosos y algunos especialmente románticos. Ideal para los amantes del género.

El juego entre Maaya y Chigira se está complicando cada día que pasa. A Maaya le gusta Chigira y si por una parte es feliz estando a su lado, por otra su falta de confianza le hace sentir que sólo le molesta. Sin embargo, Chigira demuestra que para él este juego es muy importante.

Tal es así que Chigira desea saber que más puede hacer para borrar los malos recuerdos de Kisaragi y está dispuesto a avanzar en el juego correspondiendo a los sentimientos que ella siente por él.

Segundo tomo de esta historia que resulta muy dulce, en ocasiones empalagosa, pero que engancha por la ternura de Kisaragi, con su timidez y falta de confianza como elemento a superar, y el fuerte carácter de Chigira, que bajo esa aparente frialdad esconde su gran cariño por ella. Poco a poco vamos conociendo a nuestra pareja a través de capítulos típicos (San Valentín incluido), pero transmitiendo buenas vibraciones. Continuamos.

Tras resolver el dilema sobre si continuar o no con el juego, Maaya está feliz de seguir junto a Chigira. Sin embargo, cuando él le propone subir el juego al siguiente nivel y jugar a que le corresponde, Maaya empieza a ponerse nerviosa por sus pequeñas torpezas. Por suerte, Chigira será tan dulce como siempre.

Tomo de transición, donde veremos momentos románticos y cariñosos de esta peculiar pareja, que tendrá una subida final gracias a Tezuka, quién parece estar interesado en Maaya, lo que puede que nos permita ver la cara menos amable de Chigira. Atentos.

El juego entre Chigira y Maaya sube al siguiente nivel, pero aún así a Maaya le sigue costando mostrarse cariñosa con Chigira. Por ello, Chigira le propondrá «jugar a los recién casados», lo que les permitirá avanzar aún más en su relación, donde Chigira parece que oculta algo más allá gracias al juego. Tal es así, que cuando Tezuka descubre su secreto, no dejará que jueguen con sus sentimientos.

Continúa la peculiar relación de nuestra pareja protagonista. Se nos sigue mostrando la timidez de Maaya ante Chigira, quien no responde de forma recíproca, ocultando sus verdaderos sentimientos, para mantener así el interés del lector, que sigue disfrutando de esta comedia romántica con rasgos muy clásicos, pero también con toques que le dan su originalidad.

A seguir disfrutando los más fieles del género.

El juego de amor correspondido entre Maaya y Chigira sigue subiendo en intensidad poco a poco. Hasta tal punto que ¡casi están a punto de besarse! Maaya siente que sus sentimientos crece día a día, sin saber si es correspondida por Chigira. Quizá, al apuntarse a las prácticas del equipo de atletismo, consiga resolver sus dudas. Por supuesto, Tezuka también se apunta al plan, y quizá Maaya descubra algo más sobre él.

Continúa el avance, lento pero seguro, en la relación de nuestra pareja protagonista, que nos va dejando detalles de intimidad de forma sutil, aderezados con buenos momentos de humor. En este último tomo, nuestra pareja cederá parte de su protagonismo a Tezuka, quien nos ayudará a conocer un poco más al enigmático Chigira, ganándose un poco de simpatía por nuestra parte.

Evoluciona adecuadamente.

Kisaragi no ha aparecido hoy en clase. Tras revelarse accidentalmente una foto de ella con Chigira, cree que su juego con él ha terminado y siente que ha ocultado su relación a los demás y les ha mentido. Ante su desaparición, Chigira y Tezuka salen en su búsqueda.

Finalmente Chigira encuentra a Kisaragi, que piensa que el juego debe terminar y con ello la relación entre los dos. Sin embargo, Kisaragi se queda sorprendida cuando Chigira le pide salir con él en serio y descubriéndose, por fin, los verdaderos sentimientos de este, quien lleva a Kisaragi en su corazón mucho antes de lo que pensábamos…

Hay tomos que se ganan un hueco especial en nuestra estantería, y éste debería ser uno de ellos. Tras varios problemas, confusiones, detalles, citas y sentimientos intensos, nuestra pareja protagonista se ha ganado su momento de felicidad al verse correspondidos mutuamente. Un hermoso momento al que hemos sido llevado con un ritmo pausado, pequeños detalles y acelerones ocasionales, y con una doble visión final que revela la ternura que encerraba Chigira hacia Kisaragi, demostrando que no fue nunca la casualidad la razón de que Chigira decidiese jugar con Kisaragi, sino el amor verdadero. Enternecedora.

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¡Por fin Chigira y Maaya son pareja! Tras largo tiempo, los sentimientos de Maaya han sido correspondidos por Chigira, quien desvela que si le propuso el juego fue que él se había fijado previamente en ella, y descubrir que realmente se había enamorado de ella.

Aún así, Maaya y Chigira deberán seguir conociéndose y afianzar su floreciente relación, pues la inseguridad aún pone nerviosa a Maaya, que vive en un sueño hecho, por fin, realidad. Afortunadamente, gracias a diferentes situaciones, Maaya y Chigira van avanzando con paso firme en su relación, pero Tezuka pone sobre aviso a Maaya, pues ha aparecido en el instituto la ex-novia de Chigira quien, al parecer, se la robó a Tezuka…

Nuevas situaciones románticas y nuevos enredos para una de las mejores comedias románticas estudiantiles del momento. Tras alcanzar un momento culmen en su último tomo, el comienzo de una relación debe ser un paso y no un final en la historia, por lo que ahora toca darle solidez y consistencia a la misma, superando obstáculos, malentendidos y trampas.

Esto no ha hecho más que empezar.

Una vez que han empezado a salir Maaya y Chigira y la relación empieza a asentarse, aparece Fukumori, una amiga de Tezuka que se intentará acercar a Maaya para así llegar hasta Chigira. Ello ocasionará una pequeña crisis dentro del grupo, pues al parecer era una antigua novia de Chigira, quien se la quitó a Tezuka.

Maaya, que se verá afectada al aparecer una ex, tendrá dudas acerca de la estabilidad de su relación con Chigira, ¿Cómo abordará la situación? ¿Le preguntará a Chigira? ¿Intercederá Tezuka?

Una vez asentada una relación, toca empezar a ponerla en situaciones de duda, tensión, incertidumbres y amores pasados, entre otros. Si bien la idea no es original, pero puede resultar divertida siendo bien llevada, en esta ocasión no ha sido así. Este tomo ha resultado un pequeño bajón en la historia, pues Maaya vuelve a una situación de inseguridad, que ya desentona en la historia. Esperemos que remonte más adelante. A mejorar.

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