Aunque aquí en España Jealousy nos llegó primero, en Japón se publicó como la última parte de una saga que empezó con dos tomos únicos: Las manos de Minori y Tatsuyuki Ooyamato, líder de la cuarta generación. Aquí os presentamos estos dos tomos de Scarlet Beriko que nos han llegado de la mano de Milky Way Ediciones.
Las manos de Minori
Este volumen nos presenta dos historias, una que ocupa la mayoría del volumen y una historia corta al final. Asimismo, la historia principal, que da título al volumen, la podemos dividir en dos partes.
Los dos primeros capítulos nos muestran a Minori Shigehumi, un osteópata cuyos tratamientos tienen «final feliz». El primero es también la primera aparición de Tatsuyuki Oyamato, que luego protagonizaría su propio spin-off.
Estos dos capítulos nos muestran a un Minori seguro y sensual, que seduce con facilidad a sus pacientes. Pero esta «seducción» también puede considerarse sexo sin consentimiento, depende de como se interprete (ninguno de los dos pacientes da un consentimiento explícito, pero se dejan llevar).
Los capítulos 3 a 7, por contrario, nos cuentan la historia de Minori y su verdadero amor, Sota, a partir de su reencuentro. Ahora descubrimos la verdad tras la fachada de Minori, la de un hombre corroído por el sentimiento de culpa, al creer que destrozó la carrera futbolística de Sota. Pero este no está para nada de acuerdo con ello y no parará hasta que se lo crea.
La última es una historia corta más antigua, sobre un mangaka y su compañero de piso/amante.
Las manos de Minori es de las primeros trabajos publicados de Scarlet Beriko. Nos muestra ya su dominio del dibujo y de la sensualidad en las abundantes escenas de sexo, pero le falta la profundidad y madurez emocional de trabajos posteriores.
En resumen, una historia sencilla, de lectura rápida, pero muy sensual.
Tatsuyuki Ooyamato, líder de la cuarta generación
Este tomo es una secuela a la primera historia de Las manos de Minori, y es también la precuela de Jealousy.
Tatsuyuki, heredero de la cuarta generación de la familia yakuza Ooyamato, anda bastante apático después de la marcha del doctor Minori, su primer amor. Así que Asoka lo envía a Fukuoka para que afiance la autoridad del grupo en la región. El cambio de aires no le sirve de mucho al principio, hasta que, tras una noche de borrachera, conoce a Nozomi, un profesor de guardería con sus propios secretos. La cosa se complica aún más cuando su camino se cruza con el de Rogi, un antiguo «conocido» de su padre. Y, aunque Tatsuyuki no lo recuerde, los caminos de los tres ya se cruzaron en el pasado, de una forma que marcó profundamente a Nozomi.
Este volumen no es solo una historia de amor entre Tatsuyuki y Nozomi, sino también una historia de crecimiento personal. Tatsuyuki debe madurar como persona, aceptando las responsabilidades de su posición actual y futura, al tiempo que los sentimientos que está desarrollando por Nozomi. Éste, por su parte, debe desprenderse de su horrible pasado para poder mirar hacia un futuro con Tatsuyuki.
Mientras tanto, Rogi sigue sufriendo por un amor jamás olvidado (y cuyo desenlace nos cuenta Jealousy), aunque su forma de enfrentarse a ello es bastante personal.
Respecto a Las manos de Minori, Scarlet Beriko muestra una historia más elaborada y redonda, con personajes con personalidades e historias bien definidas. Aunque puede que algunos lectores encuentren problemáticos algunos aspectos de consentimiento o las tendencias acosadoras de Nozomi, si bien tienen su explicación en la historia.
