Crónica de una muerte anunciada, supongo
Aquí no hay ni trampa ni cartón: el protagonista de este cómic, un cocodrilo que se llama cocodrilo, va a morir. Es inevitable.
Su destino está escrito, pero eso no le va a impedir disfrutar de unos buenos fideos, pegarse una vuelta con los colegas o meterse en torneos de videojuegos. También buscar el amor, que la vida son dos días. O cien en este caso.
Este es el primer día del resto de la vida de Cocodrilo.